La muñeca fomenta el aprendizaje desde varios puntos de vista, ayudando al crecimiento personal y social

La muñeca no es solo un juguete más que sirve para entretener a niños y niñas. La muñeca actúa como un compañero de juego que tiene la misión de fomentar el aprendizaje desde distintos puntos de vista. Es el juguete de siempre; un juguete que existe desde hace siglos y que ha acompañado en el aprendizaje y crecimiento a muchísimas generaciones.
Sin duda alguna, la muñeca es y siempre será el juguete tradicional por excelencia que ayuda al niño a desarrollar muchísimas facetas, como es el amor por los demás, la empatía o la imaginación.
Un vínculo que hará que crezcan felices
La muñeca ejerce como un vínculo emocional entre el niño y el entorno que lo envuelve. Aprender a ser tolerantes y ser respetuosos con los demás son dos factores súper importantes para el aprendizaje del niño, y aquí la muñeca tiene un papel fundamental.
Otro de los motivos por lo que la muñeca es un juguete pedagógico que ayuda al niño o a la niña, es que puede actuar como vehículo de comunicación. ¿Por qué? Porque la muñeca es una herramienta con la que el niño y la niña pueden decir su opinión, con la que expresan sus emociones o cuentan lo que necesitan en un momento determinado. Es un juguete que fomenta la utilización correcta del lenguaje y que da rienda suelta a la creatividad.
¿Cuáles son las características pedagógicas de la muñeca?
La muñeca ayuda a:
- Desarrollar emociones positivas.
- Enseñar lo que es la tolerancia.
- Mejorar la motricidad fina.
- Estimular la imaginación y la comunicación.
- Fomentar los sentimientos afectivo-sociales.
- Y promueve la igualdad.
Todas estas razones, son motivos de peso que nos impulsan a cumplir con nuestro compromiso: apoyar tanto a madres como a padres para que sus niños crezcan sanos y felices con la ayuda de nuestras muñecas.